El 17 de julio del año pasado, después de la fiesta privada que el luchador de UFC Conor McGregor celebró en Ibiza con motivo de su 34 cumpleaños, una mujer denunció haber sido golpeada brutalmente por el luchador irlandés a bordo de su yate.
Una irlandesa de 42 años ha formalizado una denuncia en Dublín contra el deportista mejor pagado del mundo al que acusa de haberle causado graves daños en una muñeca después de darle una patada, un puñetazo y obligarla a huir de la embarcación.
Según la denunciante, el deportista comenzó a insultarla y a criticar su aspecto. "Todo su comportamiento cambió y se volvió muy agresivo", señala. Después se le echó encima: "Te voy a ahogar, ¿quién te crees que eres?".
En España, gracias al recurso de reforma presentado por sus abogados, se ha reabierto el caso, emplazando a la víctima a que se ratifique en su declaración en los próximos días. De esta forma, hay un doble proceso en marcha, por un lado procedimiento criminal en España y por otro la vía civil que con toda seguridad será en Irlanda.
El que fuera múltiple campeón con el Real Madrid, el galés Gareth Bale parecía haber cumplido su sueño de llevar a Gales a un Mundial de Fútbol y disputarlo, sin embargo el retiro le abrió la posibilidad de desarrollarse en la otra pasión de su vida: el golf.
El galés vuelve al campo verde, su gran pasión, para competir en el AT&T Pebble Beach Pro-Am, torneo del PGA Tour en California. El torneo se disputará en California del 2 al 5 de febrero y tendrá al ya jugador de golf entre sus participantes.
Lo confirmó el mismo Bale el pasado lunes a última hora en sus redes sociales, luego de que la cuenta del torneo realizara una misteriosa publicación con su imagen distorsionada para crear expectativa antes de anunciarlo oficialmente. "Encantado de anunciar que voy a jugar en el AT&T Pebble Beach Pro-Am a principios del próximo mes. ¡Vamos!", escribió Bale en su Instagram.
A sus 33 años, el famoso lema "Gales. Golf. Madrid" que el propio exfutbolista enseñó se hará realidad muy pronto.
El Barcelona femenil se adjudicó la Supercopa de España luego de vencer a la Real Sociedad en la final, pero este hecho no fue lo insólito, sino que las propias jugadoras debieron retirar en fila sus medallas de la mesa en la que estaban dispuestas.
La imagen contrasta con lo ocurrido en la categoría masculina, donde Luis Rubiales, presidente de la RFEF sí bajó al césped para presidir el acto. La imagen del estadio José Fouto, en Mérida, está dando mucho que hablar.
Rubiales, entregó el trofeo que acredita a la catalanas como campeonas sin embargo, nadie, ni del equipo blaugrana ni de la propia federación, entregó las medallas a las monarcas de la competición.
La Federación se ha limpiado las manos y argumentó que quien debía entregar las medallas era un delegado del club, debido a que a ellos se las entregan, los aficionados molestos han propuesto la teoría en redes sociales que esto ocurrió por el altercado de las jugadoras catalanas tras la negativa de no jugar en la Selección Española mientras la dirija Jorge Vilda.
