Luego de ser campeón de la Copa Paraguay y salvarse del descenso en los últimos minutos del Clausura 2022, Sportivo Ameliano ya hizo el primer "tijerazo" para la próxima temporada.
Con el regreso de Humberto García como DT, el equipo de la "V" azulada, ya depuró una parte del plantel y la gran sorpresa es que uno de los nombres que no será tenido en cuenta es el del capitán Pablo Zeballos, quien a pesar de no jugar mucho, tenía mucha ascendencia sobre el plantel.
El propio García comentó en charla con la radioemirosa 1080 AM que Zeballos ya no continúa al igual que varios otros futbolistas que fueron "cortados" por el "tijerazo", como Luis Cáceres, Jorge Chena, entre otros. Solamente seguirán 15 jugadores del plantel actual.
Ameliano buscará reforzar jugadores en todos los puestos, comenzando desde la portería. Por su parte, Pablo Zeballos tendrá que buscar club para el próximo año.
El delantero argentino de 28 años, Nicolás Maná, tiene todo acordado para volver al fútbol paraguayo. El ofensivo exGuaraní y Sol, jugará la temporada 2023 por el recién ascendido Sportivo Trinidense.
El propio jugador, en charla con la radioemisora 1080 AM, confirmó que tiene una cuerdo con la directiva del "Triqui" y volverá al fútbol paraguayo por tercera oportunidad.
Maná estuvo últimamente en el Montevideo Wanderers de Uruguay, club que ya comunicó su salida y ahora tiene todo acordado con uno de los clubes recién ascendidos a la Primera División de Paraguay.
El delantero argentino llegó a Guaraní en el 2020 y luego de buena temporada, fue al fútbol brasileño, donde estuvo solo seis meses y luego regresó para ser prestado a Sol de América.
El 4 de diciembre del 2021 Cerro Porteño se consagraba campeón del torneo Clausura de esa temporada, en una de las definiciones más emotivas de los últimos años en el fútbol paraguayo.
A exactamente un año de aquel momento, Cerro recordó a través de sus redes sociales la consecución de su estrella 34. Con un par de corazones azulgranas y la inscripción "100:55", además de la foto de Juan Patiño festejando el gol, el "Ciclón" rindió homenaje al título conseguido en el Rogelio Livieres.
Luego de una segunda rueda perfecta, donde logró remontar varios puntos sobre Guaraní, Cerro llegó a la última fecha con ventaja lo que le permitía ser campeón apenas con un empate. La única forma en la que se le podía escapar el título, era con una derrota ante el Aborigen.
Luego de mucha polémica durante la semana previa, Guaraní decidió jugar el partido definitorio en su casa, preparando la fiesta y buscando festejar con su gente.
Todo parecía ir bien para el Aborigen de Fernando Jubero, que con los goles de Alfio Oviedo y Marcelo González logró sacar una ventaja de dos goles y caminaba seguro rumbo al título ante un Cerro que jugaba con uno menos desde el minuto 15 por la expulsión de Alan Benítez.
Pero todo comenzó a desmoronarse para Guaraní y abriéndose para Cerro Porteño desde el minuto 92, cuando Gaspar Servio y Roberto Fernández se fueron expulsados, dejando al Aborigen con 9 para la recta final.
A los 99', Alberto Espínola descontó el partido y puso a Cerro a un gol del título, tanto que llegó por intermedio de Juan Patiño en el minuto 100 con 55 segundos, materializando el milagro y dándole al "Ciclón" un título que eternamente quedará en el recuerdo de los azulgranas.
