Cerro Porteño igualó ante Nacional, sigue puntero solitario del torneo Clausura, pero no supo aprovechar el hombre más que tuvo más de un tiempo. El Ciclón monopolizó en pases y posesión, pero no creó jugadas muy claras para convertir.
El equipo de Francisco Arce no generó demasiadas acciones de gol, a excepción de un cabezazo al palo de Enzo Giménez y remate defectuoso de Patiño en la boca del arco azulgrana, que también se salvó en un par de oportunidades.
Las estadísticas indicaron una superioridad enorme de Cerro, pero eso no se tradujo en el arco rival. El Azulgrana realizó 504 pases correctos y tuvo una posesión gigantesca del 70 %, contra apenas un 30 % de Nacional, que jugó demasiado tiempo con 10 hombres.
Además, tuvo a disposición 21 córner, desaprovechando prácticamente todas, a excepción de un par de cabezazos que se fueron cerca de la portería de Santiago Rojas.
Los registros indican que Cerro probó rematar 15 veces a portería tricolor, pero solamente tres de ellos fueron directo al arco, graficando además su flojísima efectividad ofensiva.
Uno de los datos más resaltantes además que dejó el partido ante la Academia, fue la cantidad de pérdidas que tuvo el Ciclón: 117 en total, promediando más de un balón perdido por minuto.
Luego de casi tres meses después del famoso penal malogrado ante Olimpia en la última jornada de la fase de grupos de la Copa Libertadores, Claudio Aquino rompió el silencio en conferencia de prensa y se desahogó sobre el ese tema.
Ante la consulta del periodista de Nación Media, Jorge Izquierdo, Aquino agradeció que le hayan tocado ese tema, ya que tenía muchas ganas de aclarar, principalmente el supuesto gesto que hizo con el dedo a Gastón Olveira antes de ejecutar el penal.
"Me dolió mucho errar el penal. Todos dicen que era arreglado y que marqué dónde iba a patear. La situación es que estaba haciendo tiempo ya que faltaban pocos minutos y el arquero (Olveira) me preguntó qué buscaba en la pelota. Busqué el 'agujerito' de la pelota", aclaró el mediocampista azulgrana, quien fue centro de críticas tras aquella famosa imagen viralizada.
De seguido añadió que jamás haría algo así y siempre se ha identificado por defender a Cerro en todos los campos.
"Siempre he demostrado al club, al hincha el respeto que le tengo, más ante Olimpia, ya que hice goles, me he peleado con su tribuna, me han gritado de todo y hasta jugué infiltrado. Lo digo no es para salvarme, solo para aclarar que siempre he dejado todo por el club. No sé quien fue el ingenioso que hizo que yo haya hecho que eso fue arreglado. Lo felicito porque hizo un embrollo bárbaro", aseguró.
Claudio Aquino dijo estar muy feliz en Cerro y que en el último mercado de pases tuvo la chance de irse para evitar que lo sigan señalando con el dedo, pero prefirió quedarse para reivindicarse con los hinchas.
"Soy responsable de lo que pasó, me hago cargo de haber errado el penal. Sí hubo interesados por mí, pero sería algo muy fácil irme del club de esa manera. Soy un jugador que siempre quiere más. Quiero quedarme porque soy feliz, y quiero demostrarme que puedo y dar vuelta lo que estoy pasando", remarcó el ofensivo azulgrana.
Olimpia y se Cerro Porteño protagonizan el próximo domingo el primer superclásico del segundo semestre, que puede definir el futuro de ambos en la primera rueda, que suele ser definitoria a la larga.
Cerro Porteño llega irónicamente con una moral más baja y en medio de varios cuestionamientos, a pesar de ser líder solitario del Clausura. Ha ganado los cuatro partidos iniciales, luego quedó eliminado de la Copa Paraguay, que fue un golpe demasiado fuerte para la hincha principalmente.
El último fin de semana, por la quinta fecha, no pudo con un hombre más ante Nacional, pero a pesar de ello mantiene una distancia de dos puntos con respecto al Tricolor y cuatro sobre los ambiciosos y competidores directos por el título: Olimpia y Libertad.
Una victoria ayudará a sanar varias heridas y recobrar la confianza en el Ciclón, que obviamente de festejar, seguirá como único puntero.
En contrapartida, Olimpia llega con una campaña irregular en la cinco fechas disputadas, con tres victorias y dos derrotas, que lo dejan a cuatro unidades de la cima.
Con esos números, solo una victoria puede prender de nuevo al Decano en la lucha en la zona alta. De ganar quedaría a uno o dos de la cima (si es que Nacional gana) y de perder se alejará a siete puntos en apenas seis fechas, que podría ser condenatorio para el resto del torneo Clausura.
Para el equipo de Cáceres, que jugará como local, un empate no es negocio, pues mantendrá la misma distancia de la punta y además un mal resultado podría hacer tambalear la silla de Julio César Cáceres.
El superclásico está marcado para el domingo a las 15:30 en el estadio Manuel Ferreira de Para Uno.
