Un partido separa a Paraguay de viajar sin escalas a Nueva Zelanda y Australia-2023, pero para ello debe vencer en la noche de este viernes a la selección de Argentina, en el partido por el tercer puesto de la Copa América que se disputa en Colombia.
El duelo será a las 20:00 de nuestro país y podrá verse en directo por el canal GEN. La Albirroja viene de caer ante Brasil en semifinales, mientras que Albiceleste cayó con la selección local, Colombia.
El torneo ya definió a sus finalistas, Colombia y Brasil, pero aún tiene un boleto directo al Mundial reservado para el ganador del partido por el tercer puesto entre argentinas y paraguayas, que se disputará en Armenia (centro-oeste).
Ambas selecciones ya tienen asegurada la repesca -al igual que Chile, quinta-, pero tendrán 90 minutos para conseguir la jugosa recompensa.
Gauchas y guaraníes llegarán al duelo con sangre en el ojo, luego de perder las semifinales contra las cafeteras y auriverdes, respectivamente.
- "Hacer de todo" -
Paraguay vendió cara su derrota en un partido digno ante la gran potencia del continente y favorita desde el inicio a ganar la Copa América.
Las dirigidas por el brasileño Marcello Frigério, pese a la caída por 2-0, han sido el equipo que mejor ha sabido plantarse ante la Canarinha, que antes había goleado a todos sus rivales, incluido Argentina (4-0).
"Estamos muy tranquilos por todo lo que hemos hecho en la Copa América, mostramos que Paraguay es un equipo que sabe qué hace dentro de la cancha", dijo Frigério en rueda de prensa.
"Vamos a hacer de todo para lograr esto", agregó el adiestrador nacido en Italia sobre la clasificación al Mundial.
Del lado albiceleste la portera Vanina Correa, la más experimentada del equipo con 38 años, animó a sus compañeras a mantener viva la ilusión de clasificar directamente a la máxima cita del fútbol.
Perder ante Colombia "anímicamente fue un golpe, pero tenemos el objetivo bien claro: conseguir el pase al Mundial. Estamos preparadas para lo que sigue", soltó ante la prensa.
Las dirigidas por Germán Portanova, que regresará al banquillo tras perderse el último encuentro por sanción, tendrán dos agravantes:
El recio partido que disputaron ante Colombia dejó a varias jugadoras con molestias físicas. En los pasillos del estadio Alfonso López de Bucaramanga (noreste), donde se disputó la semifinal, algunas caminaron cojeando.
Además, la central Aldana Cometti deberá pasar sus días en un hotel hasta que dé negativo en una prueba de covid-19. El virus también le hizo perderse la semifinal.
- Vuelo de vuelta -
Argentina también manifestó su inconformidad por tener que viajar de vuelta desde Bucaramanga a Armenia, la ciudad en la que disputó la primera fase del torneo.
Después del partido con Colombia las argentinas debieron hacer un recorrido unos 580 kilómetros en dos viajes en avión, debido a una escala en Bogotá, para disputar ese tercer puesto.
"Es un poco cansador, son varias horas de viaje, no son viajes largos pero es mucho tiempo en el aeropuerto y cansa un poco", manifestó la defensora Julieta Cruz.
Para las paraguayas, que no se pronunciaron al respecto, significará volver a una ciudad cercana a Cali, su casa en la primera ronda del torneo.
Bucaramanga, Colombia | AFP
Las mujeres en Paraguay empezaron a patear la pelota antes que en la mayoría del continente. Las pioneras se ilusionan con clasificar por primera vez al Mundial y conseguir la joya que le falta a su fútbol femenino.
Las 23 paraguayas que disputan la Copa América en Colombia tienen una responsabilidad histórica sobre sus hombros.
Cuatro décadas después de que un grupo de mujeres jugó fútbol contra la dictadura y a 25 años de conformar una de las ligas femeninas más longevas del continente, en las vitrinas del balompié paraguayo falta una distinción: clasificar a un Mundial de mayores.
El viernes jugarán por el tercer puesto de la Copa América de Colombia con el cupo a la repesca asegurado, pero en caso de derrotar a Argentina irán directamente al Mundial de Nueva Zelanda y Australia-2023.
"Las chicas que están aquí, hoy representando al país, (...) vamos a dar todo en el último partido que queda", dijo a los medios la central Verónica Riveros.
- "Lágrimas en los ojos" -
Veintidós mujeres con pantalones cortos sobre una cancha de fútbol desafiaron a la dictadura (1954-1989) de Alfredo Stroessener en 1980.
Contra la ley que les impedía practicar el fútbol, vistieron los colores del Olimpia y Guaraní para un único partido en Asunción.
Ocho años después de caída la dictadura, en 1997 nació la liga de fútbol paraguaya, el mismo año que en Uruguay. Solo Argentina (1991) consolidó antes un torneo para las mujeres.
Irma Cuevas jugó con Nacional ese inédito campeonato. A sus 46 años sigue marcando goles en el club Humaitá y se jacta de tener un astronómico registro de 638 goles.
Integró la primera selección paraguaya en 1998, pero pese a que por las filas de la albirroja han pasado cientos de jugadoras ninguna generación ilusionó tanto como la que hoy está a puertas de un Mundial.
A través de ellas Cuevas, que dejó la selección en 2006, espera ver "culminado un sueño".
Estoy "muy orgullosa de ellas, vamos a ver ahora (...) no es fácil competir para ir a un Mundial, pero la garra guaraní siempre está ahí y gracias a dios vamos por el buen camino", señaló en conversación telefónica con la AFP desde Asunción.
En medio de los reclamos que se extienden por el continente para apoyar al fútbol femenino, Paraguay saca la cabeza. Los clubes del torneo masculino cumplen la norma de FIFA de tener una rama femenina y en el año hay un torneo Apertura y un Clausura.
"La gente aquí las vamos a apoyar, ya las reconocen", yo "voy a estar con esas lágrimas en mis ojos", comenta Cuevas.
- "De oro" -
Países con un fútbol femenino más joven han jugado jugado antes un Mundial.
Ecuador (primera liga en 2019), Colombia (2017), Chile (2008) y el propio Brasil, donde el Brasileirao femenino se estableció en 2013, se han medido antes con las potencias de Europa, Asia o con Estados Unidos.
El progreso del fútbol paraguayo se debe a la coincidencia en una sola selección de futbolistas formadas desde niñas en clubes del interior del país y con experiencia en Mundiales Sub-17 y Sub-20, explica Daniel Miranda, experto paraguayo en balompié femenino.
Jessica Martínez, indiscutible figura del equipo, debutó como profesional a los 13 años en su país antes de vestir camisetas como las del Real Madrid y el Sevilla.
"Pirayú", como es conocida, jugó en 2014 el Sub-17 en Costa Rica y el Sub-20 de Canadá, así como varias de esa "camada de oro". Entre un torneo y otro cumplió 15 años, recuerda Miranda.
El entrenador Marcello Frigério coincide con el dictamen: "es un equipo especial, son las mismas chicas que desde pequeñas crecieron juntas jugando en las categorías Sub-17, Sub-20. Son muy unidas", dijo ante los medios.
"Históricamente es la mejor selección paraguaya (...) lo que le falta es un Mundial en la absoluta", remarca el experto Miranda.
La capitana de Paraguay, Verónica Riveros, fue protagonista de una espectacular arenga que emocionó a todos. La defensora guaraní llegó hasta las lágrimas a la hora de explicar a sus compañeras el orgullo que sentía por el esfuerzo que hicieron ante Brasil, pese a la derrota.
"Les dije, ellas nos pueden ganar, pueden ganar, pero van a tener que sudar y hoy demostramos eso. Hoy, Orgullo es poco", se escucha en un momento del video publicado en las redes sociales de la Selección Paraguaya.
"Siete meses de trabajo y ustedes se dedicaron para que él (el DT Marcello Frigério) les de lo mejor y nosotros le dimos lo mejor. Siéntanse orgullosas carajo, siéntanse orgullosas de lo que son y de lo que dieron hoy", exclamó.
La experimentada futbolista paraguaya es voz autorizada para explicar la evolución que viene teniendo la Albirroja en el fútbol femenino.
"No encuentro palabras para decirles el orgullo que siento a mis 35 años. Che la abuela, vieja en este grupo y se que dieron todo", aseguró.
"Brasil aplaudió, porque nunca vio un Paraguay de esa manera, fueron sus palabras. Y no porque es Brasil, porque nosotros dimos lo mejor, hasta el fin. Ha ja'e pea kuri, Koa la ñande familia hina ko'aga. Tenemos un paso más, no está nada perdido, tenemos una revancha, guerrera es poco", acotó.
Verónica Riveros también giró hacia el entrenador brasileño, Marcello Frigério, para agradecerle por el tremendo grupo de chicas que armó para la Copa América Femenina Colombia 2022.
"Sentite orgulloso del grupo que formaste. Hoy entregamos todo por esta camiseta. Nadie se guardó nada. Lo único que les digo es gracias todo, por cada minuto, por cada corrida, por cada pelea, porque se cayó y se levantó. Gracias. Tenemos una revancha y quiero cabeza arriba. ¡Dale! Cabeza arriba. ¡Vamos chera'a!", sentenció.
La capitana guaraní incluso había arrancado su arenga en guaraní, apuntando a que cuando llegaron a la competencia nadie confiaba en la selección. "Ndajerovai nderehe, ha nde mba'e ejapo, edispara peare, nde rehe, ore rehe, umi oiva nde rogape. Porque juntas teníamos que jugar...".
