Hungría derrotó por primera vez en sesenta años a Inglaterra (1-0), este sábado en Budapest, en la primera fecha de la Liga de las Naciones, y puso término a una serie récord de los Tres Leones de 22 partidos sin perder en el tiempo reglamentario.
Hay que remontarse al 31 de mayo en 1962, en el Mundial disputado en Chile, para encontrar un desenlace parecido, en lo que entonces fue el crepúsculo de la mejor selección húngara de la historia.
El último revés de la selección de Gareth Southgate en el tiempo reglamentario fue el sufrido ante Bélgica el 15 de noviembre de 2020 en Liga de las Naciones (2-0). Ante Italia perdió en la final de la Eurocopa en julio de 2021, pero en los penales.
El partido se disputó en un estadio en gran parte a puerta cerrada a causa de los incidentes racistas en la Eurocopa de 2021. La Federación húngara utilizó sin embargo un artículo del reglamento de la UEFA para invitar a miles de niños (y a sus acompañantes), que pudieron estar en las gradas.
Los húngaros dispusieron de varias ocasiones en el primer tiempo (Szoboszlai en el 11, Zsolt Nagy en el 30, Szalai en el 34).
Ante un equipo con dos novedades en el once inicial (el delantero del West Ham Jarrod Bowen y el lateral izquierdo del Leicester James Justin), Hungría mantuvo el 70% de posesión entre el minuto 46 y el 60.
Abrieron el marcador de penal, luego de una falta de Reece James ante Zsolt Nagy. El volante del RB Leipzig Dominik Szoboszlai batió a Jordan Pickford (66).
Inglaterra deberá mostrar otra cara contra Alemania e Italia en los próximos días en este grupo 3 si quiere permanecer en la Liga A.
Budapest, Hungría. AFP.
La temporada del fútbol europeo llegó a su fin y la ventana más grande de traspasos en todo el año está por arrancar, por lo que habrá varias novedades de jugadores cambiando de clubes en el viejo continente, donde Paraguay tiene a varios representantes.
Uno de estos futbolistas es Federico Santander. El delantero está en el Bologna de Italia desde el 2018, pero después de cuatro temporadas ya no seguirá en el club del norte italiano, según la información del periodista del grupo Nación Media, Jorge Izquierdo.
Con su salida del fútbol italiano inminente, el jugador tiene ofertas de Grecia para seguir en Europa y además de Brasil y Estados Unidos, como posible retorno al continente americano.
En cuatro temporadas con el Bologna, Santander acumuló 71 partidos jugados y anotó 10 goles. Su campeonato más regular fue el primero que disputó con esta camiseta en el 2018-19, donde jugó 32 de los 38 partidos y marcó 8 goles, quedando como máximo artillero del plantel.
Perseguido por las lesiones, en las últimas dos temporadas apenas pudo jugar 11 partidos por la Serie A y uno de Coppa Italia, quedando completamente relegado.
El entrenador paraguayo Gustavo Moríngo ya está cerca de alcanzar su segundo año dirigiendo al Coritiba de Brasil, club que tomó en setiembre del 2020 con el descenso casi ya consumado, pero logró retornarlo a la Primera División luego de una gran temporada en la Serie B.
Y en su retorno al Brasileirão tiene un muy buen arranque, ya que luego de ocho fechas disputadas se ubica en el top 4 de la tabla, solo por debajo de Palmeiras, Atlético Mineiro y Corinthians, todos con 15 puntos.
En un recuento realizado por el medio Globo de Brasil, la conformación de este top 4 representa un récord para el fútbol brasileño y Gustavo Morínigo es uno de los destacados.
Los cuatro primeros de la tabla tienen a entrenadores extranjeros: Palmeiras es dirigido por el portugués Abel Ferreira; Atlético Mineiro, por el argentino Antonio Mohamed; Corinthians, por el también portugués Vítor Pereira y Coritiba por Morínigo.
Es la primera vez en la historia del Brasileirão, que se juega a fechas corridas desde el 2003, que se completa una fecha donde entre los primeros cuatro equipo no hay un entrenador brasileño.
A eso además se le puede sumar que en el top 10 hay 7 directores técnicos extranjeros y en toda la liga hay 10, de 20 equipos que juegan el campeonato, lo que es un récord total en la historia del Brasileirão, donde los técnicos brasileños parecen ir perdiendo prioridad para los clubes.
