Además de haber jugado mucho tiempo al fútbol en varios países del mundo -incluyendo Bolivia- y más específicamente en La Paz (3.600 metros de altura), fue gerente deportivo de la Albirroja en las clasificatorias para el Mundial de Brasil 2014.
Tiene un vasto conocimiento de la preparación atlética y también de la organización logística para un juego como lo que va a disputar la selección paraguaya este jueves.
El ex atacante, actualmente encabeza una empresa de representación de jugadores, especialmente de las divisiones Formativas. Se trata de Francisco Ferreira, ex delantero goleador tanto de equipos locales como del exterior. En charla con VERSUS, comentó experiencias y anécdotas relacionadas al “cuco”, llamado altura en la ciudad de La Paz y lo más importante, a su criterio cómo Paraguay debe enfrentar este cotejo.
Además tiró algunas recomendaciones para enfrentar con éxitos los efectos de la altura. Rememoró experiencia de la aclimatación de 22 días que hizo la Albirroja en La Paz. Confía mucho en el plantel albirrojo que a pesar de lo complicado que puede resultar el compromiso, pueda conseguir un buen resultado, encarando con inteligencia el juego.
“Imaginando cómo se podría presentar el partido frente a Bolivia, me gustaría que Paraguay pueda plantear el juego de una manera más cautelosa, porque necesitamos sumar. Se debe evitar correr mucho porque eso desgasta bastante en la altura”, explicó, Francisco Ferreira.
“Los bolivianos entran con todo al inicio del juego como para ahogar al rival atacándolo, pero no tienen buena posesión del balón, son más verticales. Entonces, la defensa (paraguaya) debe estar bien parada y salir rápido del fondo, tenemos jugadores para jugar de esa forma. Considero que a partir de la recuperación de la pelota, nuestra selección puede hacer daño”, puntualizó.
Con relación a las dificultades que presente jugar a 3.600 metros de altitud, dijo. “La altura es una realidad, se siente ya al llegar al aeropuerto de La Paz, pero también depende de cada organismo porque a algunos le afecta más a otros menos. La reacción no es igual en todos aun siendo un atleta de muy buena preparación”, reconoce.
“Al sentir los primeros síntomas que son mareos, dolores de cabeza, a veces sangrado de nariz, si bien son sensaciones desagradables, también juega mucho la fortaleza mental. Es decir, ante los primeros síntomas no predisponer a la mente que puede ser algo importante porque de lo contrario es muy difícil sobrellevar los rigores de la altura” resaltó.
“En la altura, también entra a tallar la temperatura, hay días que se siente una sensación de ahogo muy rápido en cualquier hora del día. En La Paz hay mucho altibajos en cuanto al clima”.
“Lo recomendable es estar lo menos tiempo posible en la altura, salvo una aclimatación previa, para no sentir mucho el efecto. Pero eso significa, llegar al aeropuerto de La Paz y luego trasladarse inmediatamente al estadio” (Hernando Siles), refirió Ferreira.
Aclimatación no garantiza
Francisco Ferreira hizo un resumen de lo que le tocó vivir en La Paz siendo el gerente deportivo de la Albirroja, cuando el seleccionado nacional realizó una aclimatación de 22 días en La Paz, antes del juego frente a los bolivianos por la sexta fecha de las Eliminatorias para el Mundial de Brasil 2014.
“Recuerdo que la selección nacional esa vez (2012) realizó aclimatación en la ciudad de La Paz, previo al partido contra Bolivia. Estuve en la parte organizativa y la experiencia fue muy buena en la parte física y fisiológica, no así en la parte futbolística” (derrota de Paraguay 3 a 1).
“El único que tuvo un inconveniente después de 15 días de trabajo fue Lorenzo Melgarejo, luego de una sesión de entrenamientos. Los demás respondieron muy bien. Aquella experiencia fue fantástica, lastimosamente el resultado deportivo fue negativo”, resaltó.
Y agregó, “Uno se pregunta si es conveniente hacer ese tipo de trabajo de aclimatación o llegar a La Paz, hora antes del partido. En definitiva, nada garantiza una victoria, tanto en el llano como en la altura, depende de la manera de cómo puede reaccionar el organismo de cada uno de los futbolistas que componen el plantel”.
“Pero si la selección ganaba ese partido a Bolivia, se hubiera dicho que la aclimatación era lo mejor para un equipo que va a jugar en La Paz, remarcó.
“No obstante, la mejor adaptación que pueda conseguir un atleta a la altura es de 20 a 21 días según los expertos, porque el cuerpo humano se adapta (a la altura) en ese período de tiempo estando de manera seguida en ese lugar”, remató.
Por: Daniel Arévalos.
