Alberto Benítez Bejarano, piloto paraguayo de apenas 12 años compite este fin de semana en Suecia, en el marco de la Tercera Fecha del FIA Karting Academy Trophy. El joven volante paraguayo se medirá en esta pista europea ante otros 70 pilotos de distintos países del mundo.
Benítez Bejarano iniciará sus actividades en Suecia con las pruebas libres de este viernes 3 de septiembre, oportunidad en la que podrá conocer el circuito de Asum Ring. El sábado tendrá allí las pruebas clasificatorias y el domingo 5 tendrá otras pruebas para intentar llegar a la gran final que se disputará ese mismo día.
En la segunda fecha de esta competencia internacional FIA, que se disputó en Adria, Italia, Benítez Bejarano tuvo un gran desempeño en las pruebas clasificatorias, llegando a remontar varias posiciones en las carreras preliminares. En una de ellas, tuvo un contacto con otro piloto y se vio obligado a abandonar, lo que le costó luchar por un cupo en la manga final.
El escenario del FIA Karting Academy Trophy es sumamente importante para cualquier piloto, ya que varios ojeadores de equipos de F1 y academias de pilotos suelen estar presentes buscando “cazar” a nuevos talentos. Benítez Bejarano deberá mostrar su mejor versión para dejar una buena impresión de cara a escalar categorías en su carrera deportiva. Benítez Bejarano es el único paraguayo que participa, luego de ser seleccionado por el Karting Club Paraguayo y el Touring y Automóvil Club Paraguayo.
El finés Kimi Raikkonen sorprendió a todos con el anuncio de su retirada de la Fórmula 1 a final de temporada, luego de veinte años y un título mundial con la Scuderia Ferrari. El “ice man” es uno de los pilotos más queridos de la parrilla debido a su particular forma de ser.
Mediante un comunicado en su cuenta oficial de Instagram, el actual piloto de Alfa Romeo confirmó la decisión de no seguir en 2022. "Esto es todo. Esta será mi última temporada en la Fórmula 1", comenzó Raikkonen, quien cumplirá 42 años en octubre próximo.
"Es una decisión que tomé durante el invierno pasado. No fue una decisión fácil, pero después de esta temporada es el momento de hacer cosas nuevas. Aunque la temporada sigue en marcha, quiero dar las gracias a mi familia, a todos mis equipos, a todos los que han participado en mi carrera y, especialmente, a todos los grandes aficionados que me han apoyado durante todo este tiempo", agregó.
Kimi dejo entrever que su vida dentro del mundo motor no termina con su retiro: "Puede que la Fórmula 1 llegue a su fin para mí, pero hay mucho más en la vida que quiero experimentar y disfrutar. ¡Nos vemos después de todo esto! Sinceramente, Kimi", finalizó.
El “ice man” debutó en 2001 con Sauber, para luego ir a McLaren en 2002 en lugar del bicampeón del mundo, Mikka Hakkinen. En su primera carrera en Malasia consiguió un podio, mientras que al año siguiente en ese mismo circuito concretaría su primera victoria. Con McLaren cosechó dos vice campeonatos del mundo, antes de dar el salto a la Scuderia de Maranello.
En 2007, Kimi subió a Ferrari logrando su único título mundial, aprovechando la guerra interna en su ex equipo. Hasta la fecha, Kimi sigue siendo el último campeón con los de Maranello.
Tras su paso por el WRC, Raikkonen volvió a la máxima categoría con Lotus, donde pudo ser tercero en el mundial. Desde 2014 a 2018 volvió a Ferrari, logrado justamente su última victoria de rojo en Estados Unidos 2018.
Raikkonen tiene el récord de más carreras disputadas en la F1 con 342 grandes premios corridos hasta la fecha, durante los cuales ha logrado 21 victorias, 18 poles y 103 podios.
Por Cristhian Tindel (@tindelcristhian)
La máxima categoría del motor a nivel mundial sufrió ayer uno de los escándalos más resonantes de los últimos años, y es que todos fuimos testigos de una serie de hechos hasta si se quiere ridículos, donde los Comisarios Deportivos de la FIA han sido incapaces de resolver una situación que, en cierto punto, requiere un liderazgo fuerte para tomar decisiones correctas, aunque la realidad fue totalmente diferente.
En este punto, es incuestionable la decisión de no correr el GP de Bélgica, ya que las condiciones de la pista y del clima no eran las adecuadas. Pero las formas, el tiempo y el circo final que se armó con un podio, han sido una bofetada a los millones de fanáticos que han estado por horas esperando la reanudación de la competencia. Es cierto que hoy la Fórmula 1 ha cambiado en relación a lo que era hace 30 años, donde probablemente si se podía correr en estas condiciones, pero hoy, a pesar de tener a los coches más seguros del mundo, arriesgar la vida de los pilotos en vano ya no es opción, y es que la idiosincrasia de la máxima de “correr como sea”, con total desprecio a la vida humana ha cambiado, y eso es perfecto para nuestros tiempos.
El punto de inflexión del domingo ha sido la incapacidad de tomar una decisión con todas las facilidades tecnológicas a la mano, y es que apenas en la primera vuelta de formación (09:25 hora de nuestro país) ya la previsión era que el clima iría a peor con el paso de las horas. Con la primera bandera roja, se dieron una serie de procesos bochornosos, con un Michael Masi incapaz de tomar una postura fuerte, como la que se necesitaba en ese momento, dejando en total ridículo a la categoría con el paso de las horas, y dándonos una imagen de total incertidumbre no solo a los espectadores, sino que a todos los involucrados en la competencia, que sencillamente aguardaban el momento de subir a sus monoplazas para seguir con la carrera.
Obviando las tres horas de espera, y un clima que realmente iba a peor, con la visibilidad bajando para agregarle un condimento más, se tomó la decisión de correr por 60 minutos, lo cual daba indicios de que si veríamos acción en pista, pero la mirada de todos quedaba atónita cuando en la tercera vuelta con el coche de seguridad, la bandera roja salía de vuelta a escena, dando así por culminada la carrera y otorgando el 50% de los puntos a los diez primeros, quienes serian los mejores clasificados en la qualy del sábado. Un escandaloso final que además tuvo un podio con los tres primeros, en un circo montado donde el ambiente era obvio, decepción y frustración, una de las mayores estafas en los últimos 15 años en la categoría.
La imagen de los coches entrando a boxes en la última bandera roja, nos trajo a la mente otro escándalo en la F1, también propiciado por la falta de decisión y acuerdo entre la FIA y los involucrados. Por supuesto hablamos del nefasto GP de Estados Unidos 2005, disputado en Indianápolis, donde apenas seis autos tomaban salida en aquella parrilla donde todos los equipos Michelin volvían a boxes, ya que la marca de gomas francesa no podía garantizar la seguridad de los neumáticos en la curva 13, donde las cubiertas sufrían un estrés gigantesco y hacían totalmente inseguro manejar el coche en aquella ocasión.
Aquella carrera, con seis coches en carrera (Ferrari, Jordan y Minardi), fue quizás uno de los momentos más negros del deporte motor, donde el mayor perjudicado fue el fanático de la F1, tal y como ocurrió ayer en Bélgica. Ambos GP comparten el concepto de malas decisión, o falta de personalidad por parte de las cabezas, como quieran, pero dejan un precedente negativo para la categoría, que de un tiempo a esta parte logró recuperar terreno en cuanto a alcance y a espectadores en todo el mundo, dañando así el buen momento de la F1 con la lucha por el título de por medio. Hoy, en lugar de hablar de una gran carrera en SPA, seguimos debatiendo sobre si fue o no correcta la decisión de no correr, y aunque se priorizo la seguridad, se pudo tomar esa misma decisión minutos después de la primera bandera roja, por respeto a los pilotos, a los equipos y por sobre todo, a los fanáticos, quienes hacen que la Fórmula 1 sea, por excelencia, la categoría reina.
