El Barça fichó este sábado al holandés Memphis Depay, haciéndose con un goleador que completa el ataque del proyecto de Ronald Koeman para impulsar al Barça hacia nuevas cumbres, y tal vez ayude a convencer al argentino Leo Messi de seguir.

Tras anunciar a principios de junio la llegada del también argentino Sergio Agüero, el Barça ha seguido reforzando su sector ofensivo con la llegada del internacional holandés Memphis Depay, que se encuentra disputando la Eurocopa.

El equipo azulgrana y el jugador "han llegado a un acuerdo para su incorporación al club, una vez terminado su contrato con el Olympique de Lyon", anunció el Barça en un comunicado este sábado.

"El jugador firmará contrato hasta la finalización de la temporada 2022/2023", añadió el equipo azulgrana en su nota, un día antes de celebrar el domingo su asamblea de socios.

Un nuevo argumento para animar a Leo Messi, que finaliza contrato el 30 de junio y mantiene en vilo a todo al barcelonismo, a renovar con el equipo azulgrana.

El club catalán no ha dejado escapar dos veces la ocasión: aunque no pudo convencer a Georginio Wijnaldum, excentrocampista del Liverpool y capitán de los Oranje, que ha aterrizado finalmente en el Paris Saint-Germain, el Barça ha logrado la firma de otro integrante de la selección holandesa.

- Codiciado -

Depay es un delantero centro que su compatriota Ronald Koeman, al que conoció cuando éste último era seleccionador de Holanda (2018-2020), intenta atraer al Barça desde hace más de un año.

La salida la temporada pasada del uruguayo Luis Suárez había dejado huérfano ese puesto en el Barça, pese a la armada ofensiva de los azulgrana con Messi, Ousmane Dembélé, Antoine Griezmann, y, en una menor medida, Martin Braithwaite, Trinçao o Ansu Fati.

Depay "puede ejercer de '9' y, lejos de ser un delantero exclusivamente de área, le gusta participar en el juego", destaca el Barcelona en su comunicado.

El holandés competirá con el puesto con el nuevo fichaje argentino del Barça, Sergio Agüero, el compañero en la selección argentina de Messi, más veterano (33 años) y habituado al banquillo en el Manchester City... Mientras que Memphis Depay era todavía el capitán y mejor goleador del Olympique de Lyon (20 goles) hace algunas semanas.

A finales de mayo, Depay (de 27 años) explicó su deseo de dejar el OL en una entrevista difundida por el diario L'Equipe : "Quiero ir a uno de los dos o tres mejores clubes de alguno de los cinco grandes campeonatos".

"Todo el mundo sabe que en los últimos tiempos he estado vinculado al Barcelona. Las noticias llegarán cuando toque", decía Depay el miércoles en rueda de prensa.

- Pilar de Holanda -

Tras un discreto paso por el Manchester United (2015-2017), se convirtió en leyenda en Lyon, donde se quedó cuatro años y medio y conquistó el corazón de los aficionados con sus goles y su buen carácter, hasta acabar llevando el brazalete de capitán desde finales de 2019.

En 2020-2021, firmó su mejor temporada en la liga francesa, terminando como segundo mejor goleador (empatado con el jugador del Mónaco Wissan Ben Yedder) y mejor asistente del campeonato francés (empatado a 10 pases decisivos con Andy Delort del Montpellier).

A pesar de una grave lesión en la rodilla en diciembre de 2019 que le hizo perderse siete meses de competición, Depay, apasionado del rap fuera del campo y cuya espalda adorna un gran tatuaje de un león, se repuso rápido para volver a recuperar su nivel.

Y las ansias por verlo de azulgrana, estuvieron a punto de jugar una mala jugada al Barça, que cometió el error de poner en venta en su tienda en línea la camiseta de Depay el 12 de junio pasado antes de retirarlo rápidamente.

A la espera de dirigirlo, Koeman fue a ver a Depay jugar con Holanda, en la victoria por 2-0 contra Austria, en la segunda jornada de la fase de grupos de la Eurocopa, el jueves.

Fuente: AFP.

La selección húngara sorprendió a la francesa al arrancarle un empate 1-1, este sábado en su partido de la segunda fecha del grupo F de la Eurocopa-2020, disputado en el abarrotado Puskas Arena de Budapest.

El carrilero Attila Fiola se erigió en el héroe de Hungría cuando adelantó a los suyos, tras una buena pared con Roland Sallai, poco antes del descanso (45+2), mientras que el atacante Antoine Griezmann logró el tanto del empate francés (66).

"Es uno de los mejores días de mi vida, quizá el mejor. Estoy muy contento después de este gran partido, es un gran resultado", declaró Fiola con emoción. "Estoy orgulloso del equipo, los fans han generado un super ambiente hoy".

La campeona del mundo es provisionalmente líder de la llave F con 4 puntos, pero debe esperar al resultado del Portugal-Alemania de este sábado en Múnich (16h00 GMT) para ver en qué puesto afrontará el tercer y último partido de la fase de grupos, contra los lusos (2º).

Hungría, con una unidad, adelanta a Alemania y es momentáneamente tercera del grupo, manteniendo sus esperanzas de pasar a octavos de final. En su último partido, el miércoles (19h00 GMT), se medirá a los germanos en Múnich.

"Tras una primera parte en la que debimos ponernos por delante, nos encontramos por debajo en el marcador por su única ocasión", lamentó Didier Deschamps, seleccionador galo, en declaraciones a la televisión TF1.

"Evidentemente, en su casa, con este apoyo (del público), no es lo que esperábamos en este partido", añadió.

Después de unos minutos de tanteo, Francia protagonizó el inicio de las hostilidades con un disparo cruzado desde fuera del área de Karim Benzema, que tuvo que desviar el meta húngaro Péter Gulácsi (14).

Momentos después, un cabezazo de Kylian Mbappé dentro del área magiar rozó el poste izquierdo de Gulácsi (17), tras centro por la izquierda de Lucas Digne, titular este sábado en detrimento de Lucas Hernandez.

- Hungría marca en su peor momento -

La ocasión más clara de la primera parte estuvo en las botas de Benzema. Mbappé recibió un centro al área, arrastró consigo a los defensas y cedió el balón al '19' en cuanto le llegó. El delantero del Real Madrid estaba solo pero golpeó mal, con el exterior, mandando la bola fuera (31).

Hungría estaba completamente KO y no podía más que achicar agua. Sus intentos de salir de su propio campo morían en la divisoria del terreno de juego, donde los mediocampistas galos habían levantado su muralla. Pese a ello, el ruidoso Puskas Arena no dejaba de alentar ni un minuto.

Paradójicamente fue en ese contexto donde llegó el tanto local. Fiola trazó un pared con Sallai en terreno francés y dejó atrás en su carrera a Benjamin Pavard y Raphaël Varane. Cuando penetró en el área, armó la pierna derecha y el balón entró pegado al palo diestro de Hugo Lloris (45+2).

El gol psicológico pareció afectar un poco a la selección francesa.

Deschamps decidió actuar y sacó a Ousmane Dembélé por Adrien Rabiot para castigar a la defensa húngara con su movilidad. El extremo del FC Barcelona avisó nada más entrar, con un lanzamiento tras recorte que se estrelló en el poste izquierdo de Gulácsi (59), pero tuvo la mala suerte de lesionarse y debió ceder su puesto a Thomas Lemar en el minuto 87.

- Griezmann fusila -

Ahora ya no era como en el primer periodo y cada vez que lo intentaba Francia, Hungría se acercaba al área rival buscando sentenciar el partido. La salida de Rabiot provocó las fisuras en el muro galo.

Poco importaba porque Francia se veía menos encorsetada. En el minuto 66, Lloris sacó de puerta pillando a los húngaros lejos de su campo, desprevenidos. Los centrales locales no consiguieron despejar el balón, que controló Mbappé en el interior del área de Hungría para ponerlo en el punto de penal. Hubo un rechace y Griezmann a la carrera fusiló a Gulácsi.

El arquero del RB Leipzig salvó posteriormente en dos ocasiones a los suyos. Primero despejó un potente aunque centrado tiro de Mbappé (82) y casi sin tiempo para recomponerse atrapó un intento más suave de Corentin Tolisso (82).

Francia lo siguió intentando pero cada vez mostraba menos claridad en sus ideas. Hungría, además, no dio muestras de debilidad, cómoda con las líneas prietas atrás y se encargó de dormir el partido hasta el pitido final.

"Es difícil incluso ante Hungría, así que vamos a tener que preparar bien el partido contra Portugal" en la tercera y última jornada, advirtió Griezmann en la televisión beIN Sport.

Budapest, Hungría | AFP

Blas Yamil Díaz Silva cerró un semestre irregular en filas del Deportivo Macará, equipo de Primera División de Ecuador. El futbolista compatriota se incorporó esta temporada al combinado ecuatoriano y no ha tenido mucha regularidad. Ahora, volvió al club dueño de su pase para este segundo semestre, Sportivo Luqueño.

Su equipo terminó entre los cuatro primeros lugares al finalizar el primer campeonato de liga. Fue su primera experiencia en el extranjero, aunque ha recorrido varios clubes a nivel local como Libertad, Deportivo Santaní, Sol de América, Deportivo Capiatá y Sportivo Luqueño. Consiguió tres títulos nacionales con Libertad (1 en 2012 y 2 en el 2014).

En una conversación con VERSUS, comentó que le ha costado un poco la adaptación al principio, especialmente por el clima que presenta esa parte del país y también la altura entre 3.100 y 2.800 metros sobre el nivel del mar.

El Macará venció por 1 a 0 a Aucas en la última fecha del torneo ecuatoriano (Blas Díaz estuvo en el banco, no ingresó) y terminó cuarto con 23 puntos, por debajo de Emelec (30), Barcelona (27) e Independiente (26).

“Me costó un poco adaptarme a lo que es el clima que es muy cambiante, con decirte que en un solo día se cumplen las cuatro estaciones del año que tenemos en Paraguay, llueve, hace calor, luego hace frío de todo un poco. A eso se suma la altura”, comentó.

El mismo agregó que la ciudad de Ambato es muy linda y que tiene todas las comodidades, pero que solamente el clima y la altura son los inconvenientes, al menos para los que no están acostumbrados.

“Recién en la última parte del campeonato me sentí más adaptado, no obstante, jugué varios partidos y marqué un gol de tiro libre en un partido. Macará no es de lo equipos grandes de Ecuador, pero siempre pelea arriba y participa de torneos internacionales”, explicó.

Díaz también resaltó que el preparador físico de Macará es Roberto Texeira, quien integró el cuerpo técnico de Pablo Repetto dirigiendo a Olimpia en el 2017.

Jugó contra "Totín" Amarilla

Luis ‘Totin’ Amarilla es otro compatriota y figura en el campeonato ecuatoriano jugando para la Liga de Quito. Después de mucho tiempo se volvieron a cruzar con Blas Díaz, quien reconoce que fue su compañero de equipo en nuestro país.

“Con "Totín" compartimos vestuarios jugando en Libertad y también en Sol de América, luego cada uno tomó su rumbo. Nos cruzamos en los enfrentamientos y mantenemos un buen relacionamiento a través del teléfono, ya que no podemos visitarnos, uno por la distancia y también por las restricciones debido a la pandemia

Por: Daniel Arévalos.