Juan Darío Cáceres y una vida dedicada al club

Por Daniel Arévalos

Juan Darío Cáceres Abbate (72), un ciudadano de Ley, respira por todos los poros el "luqueñismo". Desde muy joven metido en lo que es el club de sus amores, primero como hincha, luego integrando varias comisiones juveniles.

Prácticamente ocupó todos los cargos de la comisión directiva, hasta llegar a ser presidente de la institución (1992). Varias son las obras realizadas durante su mandato, pero lo más importe fue la remodelación del estadio Feliciano Cáceres, para ser una de las sedes de la Copa América de 1.999.

Gran propulsor de que Luque, sea una de las ciudades sede de la competencia Continental. Es autor de un libro dedicado al club “La historia oficial del Sportivo Luqueño”, lanzado en el año 2015.

Además fue el principal artífice para que la sede de la Conmebol sea edificada en Luque, ya que gestionó y consiguió con las autoridades municipales la donación de tres hectáreas de terreno para la construcción de sede de la CSF.

Ya fue partícipe de los festejos del cincuentenario del club en 1971, actualmente es presidente de la Comisión “Ciudadana” de Festejos por el Centenario, donde están organizando varias actividades como exposiciones de fotos antiguas y artesanías, festivales de música y danza. Además se tiene previsto la presentación del libro del Centenario, entre otros.

A más de ser un dirigente deportivo, también colaboró activamente en varios emprendimientos a favor de la ciudadanía. Fue reconocido por la Municipalidad local como “Hijo Dilecto de Luque”, por su aporte a la comunidad.

“Comencé siendo hincha de Luqueño, de niño iba a los estadios con mis padres, mi papá fue dirigente de la institución, tengo recuerdos imborrables de la infancia cundo con mis hermanos y mi mamá disfrutábamos dentro de la cancha, ahí comenzó el amor hacia ésta institución”, dijo Cáceres con aire de reminiscencia.

“Transcurrido el tiempo, a los 18 años integré un comité juvenil del club, estando Luqueño en la B (1968), esta comisión fue el apoyo principal de la directiva central que ese año se consagró campeón con el gran Aurelio González, retornando al año siguiente a Primera División”, recordó.

“Para recaudar fondos y apoyar al equipo, recogíamos botella y vendíamos en aquel entonces a APAL (Administración Paraguaya de Alcoholes), organizábamos fiestas, también hacíamos serenata y otras actividades con tal de juntar algo de dinero en favor del equipo”, agregó.

Ya camino a la presidencia del club, Juan Darío Cáceres fundó el “Movimiento Feliciano Cáceres”, sector interno que lo llevó al frente de la institución en 1992, hasta el 2001.

“Durante mi presidencia, el club siempre peleó en los primeros lugares, obtuvo dos vice campeonatos, cuatro semifinales, dos participaciones (en la desaparecida) Copa Conmebol a más del título alcanzado en la Copa Filigrana”, resaltó.

“En cuanto a infraestructura, puedo decir con orgullo que durante mi administración se hizo el 80 por ciento de lo que es club actualmente, a parte de las gradas, se construyeron 28 salones comerciales, sala de conferencias, instalaciones eléctricas y de comunicaciones”, agregó.

Copa América 1999 en Luque

Corrían los años 1998, Cáceres aparte de ser amigo del entonces presidente de la Conmebol, Nicolás Leoz era su pariente político. Paraguay se propuso realizar al año siguiente la Copa América, a pesar de innumerables inconvenientes especialmente en cuanto a disponibilidad de escenarios reglamentarios.

“Recuerdo perfectamente las proféticas palabras del doctor Leoz, sino hacemos (en nuestro país), esta Copa, ndahechamo’aveima (no veré más), y fue la única que se realizó aquí”, rememoró.

“La situación política no era de los mejores, de igual manera se hizo un estudio de factibilidad del estadio Feliciano Cáceres, para poner en condiciones, aumentando su capacidad (de aforo), vestuarios, lumínica y otros detalles que exigía la organización. Así comenzó la aventura para la única Copa América que se realizó en nuestro país, porque antes fueron en Lima y Buenos Aires”, remarcó el ex dirigente auriazul.

Mediante una gran inversión avalada por la CSF y con el impulso de deportistas audaces, se mejoraron gran parte del Estadio Feliciano Cáceres. La inauguración de la lumínica (22/04/99), fue un espectáculo único que se recuerda con 25 mil velas encendidas en la gradas.

Cáceres también hizo mención de los cuantiosos gastos que se tuvo para la puesta a punto del estadio Feliciano Cáceres para la Copa América, la colaboración de muchos socios e hinchas que de manera desinteresada aportaron por amor a la institución. Resaltó el aporte de 100 mil dólares de la señora María Cristina de Pane, por entonces miembro de la directiva.

“Luque fue el centro de atención de todos en la Copa América, en ese entonces, se construyeron las dos calles peatonales en el centro de la ciudad como atractivo turístico”, subrayó.

Merced a ese enorme esfuerzo y sacrificio que pusieron a prueba toda su sapiencia dirigencial, Juan Darío Cáceres recibió la condecoración “Honor al Mérito” de la Confederación Sudamericana de Fútbol.

Llega el Centenario

A pocos días del Centenario del club, la comisión ciudadana que preside Juan Darío Cáceres prepara varias actividades artísticas y culturales para la conmemoración. “Estamos preparando el lanzamiento del libro más completo sobre la historia Luqueño con más de 400 páginas para la semana del 20 de abril, para cuya recopilación participaron varias personalidades de la ciudad, algunos de ellos ya desaparecido”, explicó.

“Para mí este libro significa mucho porque recoge toda la historia de la institución y quedará como un legado cultural. Anteriormente se tenía muy pocos documentos al respecto. No hay duda que Luqueño es un club grande, en su momento muy resistido por los capitalinos. Anteriormente, Asunción terminaba en calle última. Luqueño es el primer club ubicado fuera del eje capitalino que logró el campeonato en los años 1951 y 1953.Toda estas cosas enaltecen a esta querida institución”, resaltó.

“Son varias las actividades que tenemos previstos realizar en los próximos días. El cierre de los festejos será en la noche del 30 de abril, con una Misa de Acción de Gracias en el Santuario Virgen del Rosario, luego un festival artístico en la explanada de la iglesia y la exhibición de juegos artificiales en el club para recibir el Centenario” (1 de Mayo).

“Deseo íntimamente que el club sea institucionalizado, que se realicen Asambleas limpias, transparentes, no ya las Asambleas ‘kañy’. Es la única manera de recuperar la confianza de la gente”, sentenció con la esperanza de que Luqueño resurja y muestra su verdadera grandeza.

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Rodrigo López: "Me parece que cambió todo con la expulsión"

El entrenador de Nacional, Hernán Rodrigo López, se mostró bastante satisfecho con el papel que desempeñó su equipo en la gran victoria ante Cerro Porteño. El Trico venía de sufrir dos caídas consecutivas (Libertad y Guaireña) y recuperó la sonrisa ante su vecino.

"Salió como habíamos pensado o como lo queríamos hacer nosotros contra un rival que se siente cómodo con la pelota. Nos gustó mucho la circulación que tuvimos. Si bien nos faltó un poquito de profundidad, tuvimos algunas aproximaciones. Después hubo un pasaje donde Cerro Porteño agarró la pelota, se aproximó también, después me parece que cambió todo con la expulsión, que se dio por cómo estaban los jugadores en la cancha, siempre llegamos un tiempo antes", aseguró el estratega de la Academia en rueda de prensa.

El DT charrúa rememoró la charla que tuvo con sus pupilos en el entretiempo para tratar de aprovechar el hombre de más.

"Cuando hablamos en el vestuario dijimos que era una buena oportunidad para aprovecharla porque a veces quedarte con un hombre más no te garantiza que vas a abrir el partido, que lo vas a ganar. Y creo que desde ese lado lo hicimos bien también, llegó el gol y después para más tranquilidad llegó el segundo", enfatizó.

Hicieron bien los deberes

Claudio Aquino, quizás la figura más importante que tiene Cerro Porteño, no tuvo una tarde inspirada, especialmente por la gran faena que tuvo el Tricolor a la hora de anularlo.

"Más que anular a Aquino, intentamos otra cuestión táctica. Cortamos la circulación de Lucena con Arrúa. Pensamos primero en el equipo y él tenía esa función. Entonces era difícil que le llegara la pelota a Aquino. Ese fue un poco la clave del partido. Hicimos que Boselli y los delanteros tengan poca participación. Sabemos que tenerlos cerca del área es peligroso", expresó López.

Nacional registra 3 victorias, 1 empate y 2 derrotas en el torneo Apertura 2021, donde se encuentra en la quinta posición con 10 puntos. En la próxima fecha deberá visitar a Olimpia, líder del certamen.

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Chilavert, una leyenda con carácter, personalidad y éxitos

Por Daniel Arévalos

José Luis Félix Chilavert González (55), se inició y creció futbolísticamente en el Sportivo Luqueño, aunque su consolidación como uno de los mejores arqueros del mundo consiguió jugando en el exterior y la selección nacional.

Dotado de un gran carácter, personalidad y mucha jerarquía, se abrió camino en el fútbol, no sólo como un buen atajador, sino también como un arquero goleador (62 tantos en partidos oficiales). Su extensa carrera inició en Luqueño (1980/1983), pasó a Guaraní (1984), luego fue al exterior, San Lorenzo (Arg. 1985/88), Zaragoza (Esp. 1988/991), Vélez S. (Arg. 1991/2000), Racing Estrasburgo (Fra. 2001/2002), Peñarol (Uru. 2003) y Vélez S. (Arg. 2004).

En esta recordación que realiza VERSUS por el Centenario del club, aquí otro de los grandes protagonistas que conforman la rica historia de la institución.

“Uno debe ser agradecido en la vida, para mí, Luqueño es como si fuera mi casa porque me dio la posibilidad de jugar al fútbol, me abrió la puerta y fui muy bien tratado como un verdadero hijo de la ciudad, porque nací en Luque. Todo lo que he logrado en la vida se lo debo al club Sportivo Luqueño”, comenzó diciendo el ex golero auriazul.

“A los 13 años tuve la hermosa oportunidad de iniciarme en el fútbol, todos los sueños que tenía lo cumplí, gracias al club, teniendo a grandes entrenadores como, Enrique Insfrán, quien fue mi técnico en la división Cadete, ya en la categoría Infantil a Augusto Ruíz”, recordaba José Luis.

Y prosiguió, no me quiero olvidar de nadie, “otro profesor que tuve en Luqueño fue Walter Chamorro, más adelante Carlos Arce. El preparador de arquero que me ayudó mucho fue Modesto Sandoval. También está el profesor Silvio Parodi y alguien muy especial que me hizo debutar en primera (1981) Pedro Fernández”.

A propósito, “Chila”, recordó del momento en que se produjo su debut en primera división (fue ante Sol de América en 1981). “Recuerdo muy bien, el profesor Fernández (Pedro), me pregunta si no tenía miedo para jugar en primera, ‘para nada’ le respondí, confió en mí y no se equivocó”.

“Una gran satisfacción familiar para mí fue cuando jugué el siguiente partido después de mi debut, era ante Resistencia, en cancha de Cerro Porteño, ganamos ese juego. En ese compromiso estuvieron mis padres y mi abuelo Ruperto González, fanático de Luqueño, él siempre me alentaba a seguir adelante y poder sobresalir”, refirió.

Duro inicio, pero buena cosecha

“Me iba caminando desde Campo Grande, pasando por Palma Loma (un barrio de Luque), por una picada angosta hasta llegar al club, fui a probar directamente como arquero. En el primer día había 5 arqueros, conmigo ya éramos seis en mi categoría”, recuerda sobre sus primeros pasos

La perseverancia fue un valor clave dentro de su carrera, ya desde el inicio. “Ese día el profesor Enrique Insfrán me pregunta sí en que puesto jugaba, le respondí arquero, entonces me pone de suplente. Al día siguiente me presento nuevamente y ya no vinieron los demás arqueros, se enojaron porque estuve de suplentes en el primer día de práctica. Faltaba una semana para el inicio del torneo, me tuve que fichar porque quedé sólo. Bueno el destino estuvo de mi lado y así comencé en mi querido Luqueño”.

Gran referente

José Luis Chilavert, ostenta el título honorífico de “Embajador del club Sportivo Luqueño”, que le otorgó la directiva encabezada por Celso Cáceres, por ser un gran referente del deporte en todo el mundo.

“Soy Embajador de Luqueño en el mundo, orgulloso de eso porque la ciudad de Luque, es cuna de muchos futbolistas, muchos clubes se han nutrido de futbolistas que nacieron ahí”.

Si por qué no quiere ser presidente o entrenador de Luqueño, teniendo tanta trascendencia en la institución, manifestó. “Es difícil meterme como dirigente o como entrenador, uno tiene su vida y también mis empresas que debo cuidar, no tengo mucho tiempo. Uno si está en el mundo del fútbol debe involucrarse en un cien por ciento, particularmente no me gusta perder, tampoco quiero delegar cosas” (responsabilidades), expresó.

“De cualquier manera, ayudo al club, aconsejo cuando me piden referencias de algunos jugadores, arqueros, también colaboré con las pinturas para que se pinte todo el estadio, no lo hago público, pero es una manera de ayudar, recién ahora comento esta situación. Ese es el rol del ‘Embajador’. Hay mucha manera de ayudar, no sólo con dinero”, remarcó.

En otro momento, el ex arquero también mencionó que hace gestiones con empresas internacionales para la reparación del estadio Feliciano Cáceres, pero que por ahora debido a la Pandemia, están en un compás de espera.

“Es una cuestión que estoy manejando con varias empresas, porque la preocupación pasa en poder restaurar totalmente el estadio. Sin embargo, por la Pandemia, todo se ha paralizado, las empresas también miran donde apuntar y apostar. La prioridad es encontrar a alguien que pueda ayudar”.

Falta mejorar

A su criterio, se debe mejorar muchas cosas para que el club pueda consolidarse como uno de los grandes. “En el fútbol para llegar el éxito son años de trabajo, de contratar buenos profesionales, buenos formadores para las Divisiones Inferiores. En ese sentido, creo que Luqueño está trabajando bien, pero debe desarrollarse más”, dijo.

“El éxito empieza en un buen trabajo en las Formativas, teniendo buenos profesionales. Luqueño debe profundizar eso y a la vez soñar siempre pelear los primeros lugares en el fútbol paraguayo”, resaltó.

El ex golero compatriota, apoya la gestión del presidente auriazul Celso Cáceres porque considera que fue electo legítimamente. “Apoyo totalmente al presidente Celso Cáceres y su comisión directiva, porque fue electo en Asamblea, es decir es un legítimo presidente. Los que quieran entrar (en la institución como dirigentes), deben esperar la realización de una Asamblea que presenten sus listas y son los socios los que deben elegir”, dijo como marcando territorio.

Festejos

“Valoró y aplaudo, el homenaje que se hizo a dos ex jugadores (Raúl Riquelme y Enrique Ramírez, integrante del plantel campeón 1951 y 1953), porque los reconocimientos deben hacerse en vida. Luqueño tiene muchas figuras tanto del pasado como del presente, hay que repetir estos hechos”, aseguró el tres veces número uno del mundo.

Concluyó diciendo que “los éxitos de uno siempre quedan marcados en la historia, eso no se puede borrar, pero esos éxitos no se logran sólo, si no teniendo a compañeros a lado. Es justo homenajear a todo un equipo y no individualmente”.

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