Tan solo restan horas para el inicio de una nueva edición de la Copa Conmebol Libertadores. Retrasa a causa de la pandemia del coronavirus, el torneo correspondiente al 2020 se jugará desde el 5 hasta el 21 de marzo en Argentina.
Libertad/Limpeño y Sol de América serán los representantes paraguayos en el torneo más importante a nivel de clubes en Sudamérica. Siempre es buen momento para repasar la rica historia del fútbol femenino paraguayo en este prestigioso certamen.
Obviamente, se debe empezar por aquel hito conseguido por Sportivo Limpeño en el 2016; equipo que se consagró campeón de la Copa Libertadores Femenina.
La conquista de América
En la gran final, el equipo dirigido por Rubén Subeldía derrotó por 2-1 a Estudiantes de Guaricó de Venezuela. Liz Peña y Damia Cortaza anotaron los tantos del triunfo para el elenco paraguayo.
Limpeño consiguió su primera estrella internacional en su estreno en la competencia y lo hizo de manera invicta. Triunfó en cuatro de sus cinco presentaciones.
Melissa Parada fue la asistente técnica, el preparador físico fue Ángel Fleitas y la preparadora de arqueros, Mirtha Blanco.
El plantel campeón lo conformaron las siguientes jugadoras: Kimika Forbes, Laurie Cristaldo, Stephanie Lacoste, Natalia Genes, Carmen Benítez, Damia Cortaza, Silvia Getto, Liza Larrea, Gisselle Aquino, Liz Natalia Peña, Alicia Bobadilla, Jéssica Martínez, Dulce Quintana, Claudia Romero, Griselda Garay, Marta Agüero, Natasha Martínez, Joana Galeano, Salinas y Benítez.
Esa conquista permite al fútbol paraguayo tener hoy en día dos representantes en el torneo, que en la edición venidera participarán Libertad/Limpeño y Sol de América.
Liz Peña fue la goleadora de Limpeño en la cita con tres goles, lo hizo gracias a su doblete en el debut y otro en la gran final.
Distinciones individuales
Gloria Villamayor es la futbolista con más presencias en finales de Copa Libertadores: jugó seis partidos decisivos y alcanzó el cetro en el 2012 con el Colo Colo, de hecho anotó el penal decisivo que le dio el título al cuadro chileno.
"Loli" alcanzó la final en la primera edición con la Universidad Autónoma de Asunción (UAA) en el 2009, Everton de Chile en el 2010, 2011, 2012, 2015 y 2017 con las "Albas". Su última final la disputó justamente en el certamen que se jugó en Paraguay.
Fany Gauto integró el plantel campeón del Atlético Huila de Colombia en la edición 2018.
Otras paraguayas que jugaron la final de la Copa Libertadores son Dulce Quintana y Joana Galeano con el Everton en el 2010, pero lastimosamente el Santos se quedó con la copa en esa ocasión. Otro logro importante es que la paraguaya Cynthia Franco fue la árbitra principal de este cotejo.
A nivel de goleadoras de la Libertadores, “Loli” Villamayor fue una de las máximas anotadoras en la edición del 2017. Festejó en cuatro ocasiones. Noelia Cuevas de UAA, fue una de las mayores artillera en el 2010, gracias a sus ocho anotaciones al igual que Gloria.
Laura Romero Jara anotó el mejor gol del mundo del mes de octubre en el 2017, ocurrió en la Copa Libertadores con una espectacular chilena ante Unión Española. En ese entonces, ella jugaba en River Plate.
Un golazo de perfecta chilena. El justo reconocimiento llegó del voto popular, nada menos que a nivel mundial. Laura Romero Jara compitió con otras siete futbolistas, representantes de Europa y Asia, en la votación mensual que realiza “Women’s Soccer United”, un sitio que se dedica a promover el fútbol femenino, elevar el perfil del juego y crear oportunidades a nivel mundial.
La atacante de River se impuso a la noruega Ada Hegerberg (Olympique Lyonnais), la mexicana Kenti Robles (Atlético de Madrid), la francesa Kheira Hamraoui (Olympique Lyonnais), la japonesa Riko Ueki, quien anotó para su selección, lo mismo que hicieron las suecas Emma Paulsson, Kajsa Lang y Kosovare Asllani.
Romero se llevó el primer lugar con un arrollador 76% de los votos, por delante de Asllani, que obtuvo el 11% y de Ueki, a quien votó el 3% de los participantes. Además, automáticamente se anotó entre las doce candidatas que luego competirán por el mejor gol del año 2017.
También merece mención lo de Cerro Porteño. Quedó en la tercera ubicación en el 2014 y dos veces en la cuarta posición (2017 y 2019). El Azulgrana se ubica en la quinta posición en la tabla histórica de puntos, con 36 puntos. Más atrás aparece la extinta UAA (séptima ubicación con 30 puntos).
El logro histórico de UAA
Analía Garcete y Gloria Rodríguez, Lucero Viveros, Carmen Benítez, Edilberta Cabrera, Natalia González, Damia Cortaza, Mariela Aquino y Jéssica Santacruz, Verónica Riveros, Johana Galeano, Silvia Getto, Angélica Vázquez, Noelia Cuevas, Irma Cuevas, Karina Vega, Francisca Agüero, Anabel Rodríguez, Dulce Quintana y Gloria Villamayor fueron las finalistas con la UAA en la primera edición de la Copa Libertadores (2009).
Rubén Subeldía fue el director técnico. La UAA cayó en el Grupo 2 junto a Formas Íntimas, Deportivo Quito, san Lorenzo y Rampla Juniors. Ganó todos sus partidos en la fase de grupos y superó 1-0 al Everton en "semis", con gol de Gloria Villamayor. En la final, fue caída por 9-0 contra Santos de la brasileña Marta y Cristiane.
Por: Daniel Miranda (@dani_miranda96)
Los hinchas juran que su aliento es vital para que su equipo gane en casa... Y no se equivocan, al menos en Sudamérica, donde en tiempos de gradas vacías las derrotas y los empates de los locales han aumentado.
La presencia de aficionados en las tribunas parece influir en el desempeño como locales de los equipos de Argentina, Brasil y Uruguay, según un conteo estadístico realizado por la AFP sobre las últimas tres temporadas de esas ligas, con más ganadores de la Copa Libertadores.
La pandemia desoló al legendario Maracaná, hogar del Flamengo. En el bicampeonato que ganó con sufrimiento la semana pasada en la última jornada, el 'Fla' tuvo un rendimiento del 56% en el templo sudamericano. En 2018 había sido de 77% y en 2019 de 92,9%.
"Todo hincha tiene la seguridad absoluta de tener influencia en el resultado del juego", dice a AFP Gustavo Andrada Bandeira, autor del libro sobre barras "Uma história de torcer no presente" ('Una historia de animar en el presente').
"Ahora los 'torcedores' podrán reivindicarse como los únicos capaces de transformar el ambiente de una plaza arquitectónica cualquiera en la casa de un determinado equipo. Y los datos estadísticos nos ayudan a corroborar eso", agrega, aclarando que otros factores -la preparación o el árbitro- pueden influir.
En el Brasileirao-2018, cuando una pandemia era tema de película de ficción, los locales ganaron 202 partidos, empataron 110 y perdieron 68. Al año siguiente, todavía con público, ganaron 184, empataron 98 y cayeron en 98.
En la temporada 2020, que finalizó la semana pasada, dos meses después de lo previsto debido al arribo del covid-19, los equipos anfitriones hicieron respetar sus feudos 171 veces, cerraron tablas en 108 y ajustaron 101 reveses.
- Público como motivación -
Los intentos de llenar el vacío en los estadios, cerrados al público en los tres países desde marzo de 2020, con impresiones de figuras humanas instaladas en las tribunas o con DJ reproduciendo cánticos, tuvieron poco efecto.
Jugar de local no es lo mismo que sentirse dueño de la casa. "No son simples términos, es otro significado, otra importancia y otra relevancia. Los jugadores se motivan inmediatamente [al ser anfitriones] y los rivales también reciben los ataques [de los aficionados]", señala Andrada Bandeira.
El exfutbolista Adolfo "Tren" Valencia, mundialista con Colombia y ex Bayern de Múnich, recuerda la motivación de jugar con estadios repletos.
"Yo, por lo menos, era de los jugadores que (...) cuanto más público veía, más jugaba, porque eso a mí me fascinaba", asegura. Pero "hay algunos jugadores que, cuando los estadios están llenos, entran con miedo, con presión, la bulla del público, todo eso incide, e incide mucho".
Y es que las personas necesitan de motivaciones, que para los deportistas pueden venir de metas autoimpuestas y del reconocimiento que reciben de los demás, explica Edwin Herazo, director del Grupo del Instituto de Investigación del Comportamiento Humano de Colombia.
"Es probable que al disminuir ese refuerzo o esa recompensa emocional que trae el estar frente a un público que aviva un partido, se afecte la parte motivacional durante el desempeño", señala.
- La presión -
En Argentina, cuyas barras son imitadas en toda Sudamérica, Boca Juniors y River Plate mantuvieron números similares en casa. Pero el resultado global de la Copa Maradona fue el mismo que Brasil: menos victorias locales.
En el torneo 2020 (24 equipos) hubo 117 triunfos de los anfitriones, 76 tablas y 83 derrotas. En 2019 (26 escuadras) fueron 141 victorias, 102 igualdades y 82 reveses, y en 2018 (28 elencos), 168 festejos, 105 empates y 105 caídas.
En las fases regulares de la liga uruguaya, comparando solo los cotejos disputados sin público, ha habido 84 victorias, 81 empates y 67 derrotas locales, frente a 104, 62 y 66 en 2019 y 81, 50 y 72 en 2018 (15 equipos).
"En términos de táctica y técnica, pocas cosas cambian [al jugar sin público]. Lo que puede suceder es que los visitantes se sientan más a gusto, porque no van a sufrir con la presión de los hinchas", explica el atacante brasileño Richarlison, del Everton de Inglaterra.
En la cuna del fútbol, en las primeras 26 jornadas de las últimas tres temporadas la tendencia es la misma que en las ligas sudamericanas estudiadas. En 2018 hubo 89 celebraciones visitantes y 83 en 2019. Actualmente van 101.
"Sería injusto no valorar lo que el aficionado representa para cada equipo", reflexiona el técnico argentino Marcelo Bielsa, del Leeds.
Fuente: AFP.
Guaraní empató 1-1 ante Royal Pari en el partido de vuelta de la Fase 1 de la Copa Libertadores. El global fue de 5-2 a favor del "Aborigen" que se instaló en la siguiente instancia de la competencia internacional.
El entrenador aurinegro, Gustavo Costas, habló sobre lo que fue el partido, aunque aseguró que era "imposible" analizar el juego que quedó desnaturalizado por el estado del campo de juego.
"Nosotros tratamos de salir a jugar de la misma manera siempre. Pero la cancha estaba muy difícil. Somos un equipo de gente rápida y que juega por abajo, pero esta vez tuvimos que jugar a la segunda pelota porque por abajo era imposible", expresó.
"No se puede analizar si estuvimos bien o mal. Se jugó como se pudo. Este tipo de partido se juegan como se puede. Nos perjudicó el campo de juego, no poder proponer pelotazos con jugadores como Marín o Colmán, pero lo tuvimos que hacer", agregó el entrenador.
Aún así, aseguró que el partido "estuvo muy controlado y si no era por la desgracia del gol en contra, lo hubiésemos ganado".
Por otra parte, contó que Raúl Bobadilla dejó el campo de juego "mucho mejor" que el partido de ida, pero adelantó que lo de Guillermo Benítez, quien terminó lesionado es "muy preocupante".
