Morínigo sigue sin perder con Coritiba, pero no escapa de la zona del descenso

Gustavo Morínigo volvió al banco del Coritiba este domingo luego de superar al COVID-19. Su equipo enfrentó a Grêmio en el estadio Couto Pereira y el partido acabó igualado 1-1.

Fue el segundo partido que dirigió Morínigo (el cuarto que jugó su equipo desde que llegó), que sigue invicto, pero sumar de a uno no le conviene demasiado en su lucha por escapar de la zona del descenso.

Con en el empate ante el tricolor "gaúcho", Coritiba sumó 28 puntos y continúa en la penúltima posición de la tabla, solo por encima de Botafogo. Está a un punto por debajo del Goiás y a siete del Fortaleza y la salvación. Al Brasileirão le quedan cinco fechas.

El entrenador paraguayo había debutado con una victoria ante Vasco Da Gama el pasado 16 de enero. Luego quedó contagiado de coronavirus y estuvo ausente en los empates 3-3 ante Fluminense y 1-1 ante São Paulo.

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Gómez ya es un hombre histórico del fútbol brasileño

Gustavo Gómez logró igualar muchas marcas históricas y entre ellas, ser el segundo capitán extranjero en levantar una Copa Libertadores con un equipo brasileño.

El paraguayo impuso liderazgo desde que llegó a Palmeiras, uno de los gigantes de Brasil. Poco a poco fue agarrando el brazalete y desde la última parte del 2020, fue el capitán indiscutible del campeón de América.

Gómez levantó la Copa Libertadores como capitán del "Verdão” y con ello inscribe su nombre en la historia del fútbol brasileño, al convertirse en el segundo futbolista extranjero capitán de un equipo brasileño, que se corona campeón de América.

Además de Gustavo Gómez, el único futbolista extranjero en levantar la Libertadores, fue el uruguayo Hugo de León, campeón de la Libertadores con Gremio, en 1983. De León fue tres veces campeón de América: una vez con el equipo de Porto Alegre y en dos ocasiones con Nacional de Montevideo.

 

 

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Platense vuelve a Primera y dos paraguayos quedan al borde de la gloria

Platense, uno de los clubes más tradicionales del fútbol argentino, volvió a la primera división después de 22 años, al ganarle por penales a Estudiantes de Río Cuarto, que tuvo a dos paraguayos en sus filas y quedó al borde de la gloria.

En el equipo de Estudiantes Río Cuarto, ingresaron en la complementaria, Néstor Ortigoza, campeón de América y mundialista con la selección paraguaya. El mediocampista de 36 años ejecutó y anotó el primer penal de su equipo.

A los 77 minutos, otro paraguayo, Javier Ferreira, ingresó en el equipo de Río Cuarto, pero no se anotó en la tanda de penales. Ferreira es un delantero compatriota de 28 años, que hizo toda su carrera deportiva en Argentina. Es oriundo de San Pedro del Ycuamandyju y comenzó en Defensa y Justicia. También estuvo en su momento por el Rangers de Chile.

El 'Calamar', como se conoce a Platense, empató 1-1 en los noventa minutos con el equipo cordobés, y se impuso por 4-2 en la definición por penales en el partido que se disputó en el estadio de Newell's Old Boys, en Rosario.

En un duelo a todo o nada, Matías Tissera había puesto a Platense en ventaja a los 5 minutos, pero Ibrahim Hesar (38) anotó el tanto de la igualdad para Estudiantes de Río Cuarto, que venía de perder -también por penales- la final del primer ascenso con Sarmiento de Junín, el otro club que asciende en esta temporada desde la segunda categoría.

Platense, fundado en 1905 y que llevaba 22 años sin jugar en la máxima categoría, desde su descenso en 1999, será el 26° club en primera, con un torneo que comenzará en menos de dos semanas.

Dirigido por Juan Manuel Llop, Platense había alcanzado varias definiciones en las últimas cuatro temporadas del ascenso, pero recién en esta oportunidad consiguió el boleto a primera, después de superar una final tensa y de dientes apretados.

Tras varios años en primera división, Platense retrocedió a la Primera B Nacional (segunda) en 1999, y luego dio otro paso hacia atrás al caer a la Primera B Metropolitana (tercera), de la que regresó en 2018, y ahora se dio el gusto de volver a codearse con los grandes.

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