Casi todos los jugadores paraguayos que juegan en la Superliga Argentina retornaron al país y a excepción de los mellizos Romero, el resto de los jugadores compatriotas buscará otro nuevo rumbo, principalmente por la devaluación de la moneda del país vecino, que afecta directamente al bolsillo de los atletas.
Hasta el momento solamente Robert Rojas, Ángel y Óscar Romero aseguraron su vuelta para cuando reinicie la temporada en la Superliga Argentina. Los que también seguirán en el vecino país, pero no volvieron a Paraguay, son Danilo Ortiz, de Godoy Cruz y Matías Rojas, de Racing.
El primero que confirmó que no volverá ni por si acaso, es Antony Silva. El portero confirmó que le adeudan varios meses de salario y además argumentó otras cuestiones para no volver a ponerse la camiseta de Huracán, al que llegó a principios del 2019.
El volante Marcelo Estigarribia es otro que no continuará en el vecino país. Su vínculo con Colón de Santa Fe culmina este 30 de junio y según fuentes, es casi imposible que vuelva a arreglar con el club, por cuestiones económicas. Además, el cuadro aurinegro le adeudaría algunos meses de salario.
Cecilio Domínguez, uno de los jugadores mejores pagos de la Superliga, podría buscarse otro destino. Su agente aseguró que la cuestión económica es determinante y aunque tiene contrato con Independiente, se está viendo algún nuevo mercado para él.
El caso de Junior Alonso ya es sabido y no continúa en Boca Juniors. Su destino estaría en Brasil. El zaguero argumentó cuestiones particulares, pero el problema real sería la cuestión económica.
El zaguero Saúl Salcedo es otro que debería retornar, pero aparentemente le buscarán un nuevo mercado. Huracán lo quiere vender como sea y la idea del jugador tampoco sería retornar a la Superliga.
Richard Prieto también retornó de Godoy Cruz, pero ya no volverá, al igual que el volante de General Díaz, Aldo Maíz. El caso de Brian Ojeda, que estuvo a préstamo en Defensa y Justicia, es una incógnita, pero de última, deberá regresar a Olimpia.
El problema de todos tiene un denominador común: la devaluación de la moneda argentina.
El problema real
Según pudo averiguar VERSUS con los afectados, la “piedra en el zapato” de todos los jugadores es el sueldo en pesos y el cambio del dinero a la moneda norteamericana, ya que del monto cobrado solamente pueden cambiar 200 dólares por mes, o deberían recurrir al “mercado negro” donde la cotización no es muy favorable.
Los futbolistas reciben el salario en pesos y no se ven afectados en sus gastos cotidianos en dicho país, pero la mayoría de ellos necesita cambiar para darle una mayor utilidad y quizás enviar al país. Y es ahí donde radica el problema, ya que el gobierno argentino limita el cambio.
Además, la mayoría de los clubes propondría una rebaja importante para el reinicio de la Superliga.