Olimpia fue uno de los primeros equipos en realizar las pruebas de COVID-19, que es el primer paso que exige la APF, para pensar en la vuelt del fútbol paraguayo.
Según el periodista del Grupo Nación, John Walter Ferrari, las casi 40 pruebas realizadas entre jugadores, cuerpo técnico y personas que trabajan con el plantel principal, salieron negativas y es una gran noticia pensando en la vuelta de los entrenamientos.
Con esto, el Decano solamente planifica la vuelta de las prácticas, que primeramente serán individuales, desde el miércoles 10 de junio. Las actividades físicas serán por grupos de hasta máximo 12 futbolistas, que deberán cumplir con ciertos protocolos, como distanciamiento e higienización estricta.
Olimpia no puede contar por ahora con su entrenar, Daniel Garnero y los asistentes técnicos, Andrés San Martín y Facundo Espina. Todos ellos en cuarentena obligatoria, tras retornar al país en estos días, al igual que los futbolistas uruguayos, Diego Polenta y Tabaré Viudez.
Al igual que General Díaz, que presentó a su plantel principal sorpresivamente, Sportivo Luqueño y Guaraní también cumplieron con las pruebas de COVID-19, que es el primer gran paso hacia el reinicio del fútbol paraguayo.
Este sábado bien temprano, los jugadores de Guaraní se presentaron para el test, en el Comité Olímpico, sede propuesto por el Aurinegro para llevar a cabo los entrenamientos, tanto individuales como colectivos.
El Aurinegro es uno de los que nunca dudó en realizarse los test de COVID-19, ya que es uno de los pocos clubes que viene cumpliendo económicamente con sus jugadores. El plantel de Guaraní fue uno de los que no apoyó el paro de futbolistas, que se planteó en ayuda de los más "necesitados".
Por su parte, los futbolistas de Luqueño, que recién a última hora del viernes acordaron con la directiva, se presentaron sin inconvenientes en el estadio Feliciano Cáceres para la realización de las pruebas. El Auriazul amenazó en principio no acudir, por deudas impagas y por ahora la situación se "parchó" con arreglo verbal.
Hay que recordar que Luqueño se quedó directiva. Renunciaron más de directivos y solamente quedaron. Además fue cancelada su cuenta bancaria y en algún momento deberá llamar a una Asamble Extraordinaria.
Todo cambia en cuestión de horas. Hasta altas horas de la noche del viernes, los futbolistas del plantel profesional de General Díaz habían decidido no presentarse a las pruebas de COVID-19, el primer paso hacia la vuelta del fútbol paraguayo, Sorpresivamente, en la mañana de este sábado, los jugadores se presentaron en la se del el club para realizarse el test.
De nuevo, presión dirigencial pudo más. Los futbolistas habían asegurado hasta última hora que no se presentarían por el incumplimiento del club, que no les paga hace seis meses aproximadamente. Trataron de llegar a un arreglo con el presidente del club, Jorge González, pero no hubo caso y la decisión estaba tomada.
Según se supo y había comentado el propio médico de General Díaz, el club había inscripto en su lista a solamente 16 futbolistas, en su mayoría juveniles, pero al final los del plantel principal volvieron a ceder y se realizaron las pruebas. Los jugadores del Águila se vieron obligados, ya que Luqueño, el otro equipo que se había plantado, finalmente cedió, tras un arreglo con su directiva.
Además, hay que recordar que el propio presidente de la APF, Robert Harrison, recomendó a los jugadores que se realicen las pruebas, ya que advirtió que no habría "después". La Asociación paga la totalidad de los test y aseguró que más adelante ya no absorbería los costos de los que se negaron. Incluso dijo que si algún club no se presentaba al reinicio del Apertura, se podría aplicar el Walk Over.
