Con 18 años de edad y tras destacarse como goleador de las divisiones inferiores del club Nacional y ser convocado a la selección paraguaya sub 17, el juvenil futbolista paraguayo Gustavo Peralta pasó las exigentes pruebas médicas a las que fue sometido y fichó por el poderoso conjunto brasileño de Palmeiras por dos años.
Peralta, que en las formativas de La Academia de nuestro fútbol lució el dorsal número 10 con sus corpulentos 1,80 metros de altura, sigue rompiendo barreras ya que el mismo posee tan solo un 20 por ciento de audición, lo cual no le impidió destacarse como un goleador nato en el área rival.
Gustavo empezó a chutar desde los 6 años y tras fichar por Nacional su goles dieron que hablar y llamaron la atención de numerosos empresarios, a tal punto que los equipos más grandes de nuestro fútbol, Olimpia, Cerro Porteño y Libertad, lo tuvieron en la mira desde hace tiempo.
De esta manera, el juvenil futbolista compatriota tendrá la magnífica oportunidad de seguir creciendo en el competitivo fútbol brasileño al que accede a través de Palmeiras y mediante sus excelentes atributos técnicos y futbolísticos.
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Poco a poco se va ganando su lugar en el equipo. Así como están las cosas, está para ser el central titular de Boca Juniors en el juego de ida de los octavos de final de la Copa Libertadores, ante Atlético Paranaense.
A base de esfuerzo y buen rendimiento, va ganándose un hueco en el equipo y el cariño de los hinchas. Como él mismo lo está experimentando, no es fácil jugar en el elenco Xeneize, donde la presión es al máximo.
"Con la camiseta de Boca no tenés margen de error, te lleva a estar siempre exigido, cuidarte al máximo y entrenar para cuando te toque jugar. Es buena esa presión porque no da tiempo de relajarte", afirmó el defensor a Radio Rivadavia de Argentina.
Seguidamente, se refirió a cómo fue yendo de menos a más. "Yo trabajé siempre para ser titular, pero el que toma las decisiones es el entrenador, uno tiene que respetar esa decisión y estar preparado cuando toque jugar", expresó Alonso.
Aprovechando el buen clima y su estadía por suelo nacional, son "descuereados" por así decirlo. Los futbolistas paraguayos Ángel Romero y Miguel Almirón, están entrenando por su cuenta.
El primero de ellos, espera finiquitar su situación con San Lorenzo de Argentina, mientras que el otro aguarda para sumarse a la pretemporada del Newcastle United de la Premier League de Inglaterra.
Bajo la atenta supervisión de un reconocido profesional, ambos dan todo de sí para no perder ritmo de competencia. Por citar, hacen trabajos de resistencia, potencia y fuerza, así como ejercicios aeróbicos.
